Seguramente
muchos recuerden la serie de televisión estadounidense La mujer biónica (The
Bionic Woman) que surgió a partir de la popular serie El hombre nuclear o
conocido también como El hombre de los seis millones de dólares. La mujer biónica
era interpretada por la actriz estadounidense Lindsay Wagner.
La
protagonista de esta serie era Jaime Sommers, una tenista profesional de 28
años que, tras un accidente de paracaídas queda lisiada. Varias partes de su organismo
fueron repuestas a través de la cibernética por Oscar Goldman (funcionario del
Gobierno estadounidense) y el Dr. Rudy Wells, quien le implantó un oído
mejorado ultrasensible, un brazo
artificial de enorme fuerza y ambas piernas biónicas que le permitían
correr a altas velocidades.
Pues ahora las innovaciones tecnológicas pueden hacer que lo que ayer era ficción hoy sea la realidad de la ciencia actual. Esto es particularmente cierto con la mano prostética que trae a la realidad la ficción de la reposición de partes del cuerpo a través de la computadora. La mano biónica, denominada i-LIMB, la cual fue nombrada uno de los 50 mejores inventos de este año por la revista Time.
Durante
un mes, el brazo amputado de Pierpaolo Petruzziello fue conectado a un miembro
robótico, lo que le permite percibir las sensaciones y el control del brazo con
sus pensamientos. Este adelanto tecnológico traerá nuevas esperanzas a personas que perdieron un miembro superior y quedaron devastadas e imposibilitadas a tener una vida normal.
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